Días atrás integrantes de nuestra Federación de Sindicatos de Trabajadores Municipales de la Provincia de Buenos Aires mantuvimos una reunión con el Senador Nacional y compañero Miguel Ángel Pichetto, candidato a Vicepresidente en las próximas elecciones ejecutivas.
En dicha reunión estuve presente en mi carácter de conductor de la entidad, acompañado por el Secretario Adjunto, Humberto Bertinat; también formaron parte del encuentro el Secretario General de la Asociación de Empleados de la Dirección de Rentas e Inmobiliaria (AERI), Daniel H. Locuoco, y representantes de distintos gremios municipales.
Nuestra organización es una organización democrática, abocada a la vida gremial, con una absoluta independencia política. En nuestro seno, y como reflejo de institución democrática y multisectorial, tenemos diferencias políticas, diferentes puntos de vista, pero lo que es absoluto e indiscutible, y que prima ante cualquier otro tipo de interés, es la lucha gremial en defensa de los trabajadores.
Resulta paradójico que desde nuestra oposición gremial, anoticiados del mencionado encuentro, el cual no desconocemos, se rasguen las vestiduras, cuando históricamente tanto gremial como políticamente se han vendido al mejor postor, pidiendo desesperadamente “espacios” en donde sea.
No hace falta hacer mucha memoria para recordar que por las calles de Avellaneda un entonces “randazzista” junto a una senadora “Pro” oficialista, recorrían las calles juntos. Pidieron el reconocimiento de la Confederación General del Trabajo (C.G.T), y terminaron enrolados al “moyanismo”.
La distancia que nos separa es la diferencia entre vender un sello de representación inexistente, y permitir la libertad ideológica y de trabajo político.
La reunión que alarmó a tantos que mantuvimos con el compañero peronista Miguel Ángel Pichetto, un hombre moderado y conciliador, no fue más que para escuchar su postura y propuesta de trabajo.
Es dable destacar como muestra de madurez política, pero sobre todo democrática, que muchos compañeros referentes de organizaciones de base enroladas a la FSTMPBA se encuentran dentro del espacio “Frente Todos”, y hace tiempo trabajan en sus distritos, sin que ello signifique que esté involucrada toda nuestra la institución.
La base de libertad política es clara, lo único que ésta Federación nunca permitirá es la deslealtad gremial y cualquier acto que vulnere la actividad.